Isla de Navidad

La Isla de Navidad es uno de los lugares más tranquilos y seguros del planeta. Se encuentra en un rincón apartado del océano Índico, a 500 kilómetros de la costa de Indonesia, tiene la condición de territorio externo de Australia y está administrada por las autoridades australianas. La isla tiene una superficie de tan solo 135 km² y una población de menos de 1500 habitantes. No tiene idioma oficial, la tasa de criminalidad es sorprendentemente baja y se trata de una mezcla armoniosa de diferentes culturas y tradiciones. Pero la mayor ventaja de la Isla de Navidad es su ecosistema prácticamente intacto, que sus habitantes preservan con esmero.

Isla de Navidad. Autor: Jungle Jack.

Siglos de historia

La isla de Navidad fue descubierta por los europeos por primera vez en 1615, pero durante mucho tiempo permaneció sin nombre. Todo cambió el día de Navidad de 1643 gracias a la mano ligera del capitán William Minors. Al pasar por allí, se dio cuenta de las ventajas de la isla y, sin pensarlo mucho, le dio un nombre en honor a la festividad. El primer barco británico atracó aquí en 1688, liderado por el navegante William Dampier. Sin embargo, pasaron siglos antes de que el naturalista John Murray explorara la isla en profundidad en 1872. Después de estudiar cuidadosamente sus características geológicas, el médico descubrió importantes depósitos de fosfato. Junto con George Clunis-Ross, comenzó a exportar este valioso producto en 1895, fundando la Christmas Island Phosphate Company.

El período de la Segunda Guerra Mundial no es un hecho menor en la historia de la isla. Fue una época difícil, ya que la vida de sus habitantes se vio afectada por todos los momentos trágicos de la guerra. Entre 1942 y 1945, la isla estuvo ocupada por los japoneses. Muchos de los habitantes huyeron o fueron evacuados antes de la invasión japonesa del 31 de marzo de 1942. Los que se quedaron fueron capturados por los soldados y retenidos como prisioneros de guerra.

Hasta 1957, la Isla de Navidad estuvo gobernada por Singapur, una colonia británica en aquel momento. Todo eso cambió cuando Australia la compró literalmente el 1 de enero de 1958 por 2,9 millones de libras. Como resultado de este acuerdo, el Día del Territorio se celebra anualmente el 1 de octubre y todos los isleños lo celebran con gran entusiasmo.

Verano perpetuo y sin huracanes

La Isla de Navidad tiene un clima tropical húmedo con abundantes precipitaciones. Las temperaturas rondan los 27 °C durante todo el año. A pesar de esto, el agua del océano siempre está fresca y con olas. No hay grandes playas de arena en la isla, la costa está cubierta de rocas rocosas. En muchos lugares, el camino hacia el agua está bloqueado por acantilados y rocas. La Isla de Navidad tiene una ubicación geográfica especial: se encuentra en una zona de baja actividad sísmica. No hay huracanes ni tsunamis, y es seguro quedarse aquí tanto en invierno como en verano. El único inconveniente es una temporada de lluvias bastante larga, que se caracteriza por lluvias frecuentes y repentinas. Pero incluso durante este período, el clima es soleado y cálido la mayor parte del día. Es por eso que la Isla de Navidad atrae a viajeros de todo el mundo: es salvaje, interesante y de una belleza increíble.

Isla de Navidad. Autor: David Stanley.

Comida según un horario

Si bien en la isla no hay problemas con el agua potable gracias a la abundancia de fuentes de agua dulce, la situación es mucho peor con la alimentación. Aquí no hay grandes mamíferos y, por lo tanto, no hay carne fresca, excepto aves de corral. Lo mismo ocurre con muchas frutas, verduras y hierbas: es casi imposible cultivarlas debido a las peculiaridades del suelo. La tierra de la isla es infértil y apta para un número limitado de plantas. Entre las excepciones están las palmeras bananeras y cocoteras, los mangos, la papaya y la fruta del dragón.

Los habitantes de la isla pueden comprar todo lo demás en la tienda: los productos llegan en avión desde Australia cada dos semanas. Cuestan mucho más que en el continente. Además, puede que no sean muy frescos, pero se agotan en cuestión de horas tras su llegada. La mayoría de los habitantes comen en un pequeño número de restaurantes, que cuentan con todo lo necesario. Aquí se combinan armoniosamente las tradiciones culinarias de muchos países. La lista de recetas tradicionales incluye platos a base de arroz y salsa de soja, pollo frito y guisado, pescado, mariscos y gachas dulces con leche de coco.

Migración del cangrejo rojo

En la Isla de Navidad, cada año unos 120 millones de cangrejos rojos migran en masa desde la jungla al océano para reproducirse y desovar. Se trata de un acontecimiento espectacular sin parangón en la Tierra y que suele describirse como una de las maravillas de la naturaleza. La migración dura varias semanas, durante las cuales la mayoría de las carreteras de la isla están cerradas. Los cangrejos están protegidos por la ley y son muy apreciados por los lugareños. Los cazadores furtivos son castigados con enormes multas e incluso con prisión.

La migración comienza con el inicio de la temporada de lluvias. No hay una fecha específica, suele durar de octubre a diciembre. Si bien la lluvia proporciona las condiciones húmedas necesarias, la secuencia de reproducción también está estrechamente vinculada a las fases de la luna, ya que las hembras de cangrejo liberan sus huevos en el mar durante la marea alta del último cuarto lunar. Los machos viajan primero a la orilla donde cavan madrigueras. Luego se unen a las hembras: tiene lugar el apareamiento. Antes de regresar al interior, los machos hacen una última incursión en el océano. Las hembras comienzan a poner huevos a los tres días de aparearse y permanecen en las madrigueras húmedas excavadas por los machos durante otros 12 o 13 días para permitir que los huevos se desarrollen.
Cuando los huevos entran en contacto con el agua, nacen cangrejos bebés. Las diminutas larvas son arrastradas al océano por las olas y, después de unos meses, se convierten en animales similares a los camarones llamados megalopas. En la etapa final de este proceso, se congregan en charcos cerca de la orilla antes de convertirse en cangrejos jóvenes. Esta es realmente una vista asombrosa que requiere que la gente no haga nada más que dejar a los cangrejos en paz y no interferir con la naturaleza.

Isla de Navidad. Autor: Jon Faulkner.

Selva intacta

Los amantes de las emociones fuertes pueden visitar la parte más salvaje de la isla, cubierta de árboles y arbustos tropicales. Hay pocos senderos y casi ningún rastro de civilización. Es fácil perderse en la jungla, por lo que es mejor ir allí con un guía local. Al mismo tiempo, no hay que tener miedo de los animales salvajes, simplemente no hay ninguno aquí. Los mamíferos más grandes son los roedores, que antaño fueron traídos a la isla por los navegantes europeos en las bodegas de los barcos. Pero existe el riesgo de encontrarse con arañas enormes y escolopendras, muchas de las cuales son venenosas y pueden dejar quemaduras en la piel.

Simbiosis de culturas y tradiciones

La Isla de Navidad es un lugar armonioso en el que conviven personas de diferentes nacionalidades y religiones. Entre ellos se encuentran malayos, chinos, australianos, inmigrantes de Indonesia y Europa. Casi todos los meses se celebran festivales temáticos, muchos de los cuales incluyen trajes coloridos, música y bailes. Las creencias más comunes son el cristianismo, el budismo y el islam. A pesar de esta riqueza cultural, la isla tiene una tasa de criminalidad prácticamente nula. Hay una comisaría de policía e incluso una prisión, pero la mayor parte del tiempo está vacía. La seguridad en las calles se debe a la pequeña población y al aislamiento geográfico de la isla del mundo exterior. Al fin y al cabo, en caso de delito, es extremadamente difícil escapar y no hay ningún lugar donde esconderse.

VK9XU. ¿Dónde se encuentra la Isla de Navidad? Mapa.